La pregunta sobre el fin del mundo ha intrigado a la humanidad durante siglos, y recientes declaraciones de la NASA han revivido el interés en las predicciones del renombrado físico Stephen Hawking. En un documental titulado “The Search for a New Earth“, Hawking afirmó que la Tierra podría ser habitable solo hasta el año 2600, momento en el cual se transformaría en “una gigantesca bola de fuego” debido a factores como el calentamiento global, el cambio climático y el efecto invernadero.
La NASA, aunque no proporciona una fecha específica para el fin del mundo, ha reforzado las teorías de Hawking al alertar sobre el riesgo inminente que enfrentamos si no cambiamos nuestro comportamiento. Según la agencia espacial, el agotamiento de recursos energéticos y la falta de acción frente al cambio climático podrían acelerar la desaparición de nuestro planeta más de lo que muchos podrían imaginar.
Ante este sombrío panorama, la NASA ha intensificado sus esfuerzos para proteger la Tierra, no solo desde el interior sino también desde el espacio. La agencia ha implementado un nuevo programa que identifica amenazas potenciales para nuestro planeta, como el impacto de asteroides. Además, se encuentra en constante estudio del cambio climático, buscando formas de mitigarlo y destinando recursos para la observación terrestre.
La advertencia de Hawking resuena con fuerza en un momento en que la crisis climática se intensifica. Expertos y activistas ambientales coinciden en que es fundamental actuar de manera urgente para preservar nuestro hogar. La NASA subraya que, si no se toman medidas inmediatas, la posibilidad de un futuro desolador se convertirá en una realidad.