Aquí en nuestro país tenemos un muy pintoresco y lindo proverbio: “Con la cara bonita y el culo cagado”, perfectamente alusivo a nuestro gusto en la apariencia, de nuestro afán por fingir.
Por supuesto, por mera especulación uno puede llegar a creer que este bochornoso proverbio ha de haber sido fraguado en la tranquilidad del hogar más humilde, con baño de día de por medio incluido, cuando en realidad deberíamos empinar nuestra mirada un poco y buscar su prominente origen en el sutil mundo de la política, hoy es deprimente observar que aunque no existe bloqueos en la vía , la gasolina se adquiere sin necesidad de largas colas , si vemos como quieren tapar las necesidades de la gente , el aumento de la delincuencia , las vías acabadas , donde se maquillan las vías principales para que los turistas se lleven una verdad a medias , las cuales a punta de bellos videos creados desde la oficina de prensa que maneja Jorge Benavides , el cual ahora recibe la gente como reyezuelo de vereda , olvidándose que le queda escasos nueve meses a el y su amo para que vuelva a la calle de donde salió a estar en ese cargo.
No de otra forma podríamos observar el derroche de fastuosidad con que el bello municipio de Popayán da la bienvenida a la Semana Santa, pero podemos recordar lo que en días pasados se ha sentido al subir el predial . el exigir la salida del Secretario de Tránsito, la galería de la esmeralda convirtiéndose en un rincón donde se resalta la apestosa ciudad Popayán y hoy se dice que inauguran la vía que sigue siendo una calle donde la prostitución, la basura y la delincuencia es el pan de cada día
Pero es apenas obvio. Cuando un visitante importante está por visitar nuestra humilde morada, no escatimamos en arreglar, limpiar o esconder los que consideramos los defectos más evidentes y molestos de nuestro hogar: recogemos apresuradamente calzones(vendedores ambulantes) y medias ( se colocan bombillos nuevos) , ropa sucia ( se pintan las calles ) , limpiamos el polvo ( hasta se exige que urbaser funcione), posponemos el polvo ( el concejo todos santos) , organizamos, tapamos, escondemos; que todo aparente encontrarse en su justo lugar para que el consuelo de tener una casa limpia y en orden deslumbre y descreste a los visitantes, les pique la envidia, se sientan incómodos con sus propios desórdenes ocultos. Y si por alguna casualidad innombrable vienen los comentarios ensalzadores, de muy buena gana los aceptamos con una humildad hipócrita y desbordante. Y si no, tratamos de hacerle notar al otro, suscitamos su respuesta.
Por tanto, y en perspectiva, resulta absolutamente comprensible el afán que movió a la administración payanesa a desaparecer sus fealdades más notorias para hacer de su ciudad un lugar mucho más agradable y placentero para sus insignes visitantes turistas que compartirán las procesiones , las artesanías, y rumbeadero que no faltan para el famoso inicio para mucho de la PARRANDA SANTA . No solamente recogieron sus calzones del tendedero, sino que, con una vehemencia asombrosa, prácticamente sacan de las calles a los cientos de vendedores ambulante y a esos indigentes que las habitan para proporcionarles, a cambio, suponemos una paga por esos días para que no aguante hambre y los habitantes de calle una ventajosa estancia en los calabozos locales, un buen corte de pelo y sus tres comidas reglamentarias durante su estadía de los turistas que llegan a orar y dar gracias a Dios por haberse crucificado para que los hombres seamos iguales, una verdadera hipocresía. No es para menos la inusitada alegría de los habitantes de la calle, que ven perfectamente remunerado (¡ya era hora!) su acogimiento a las leyes temporales que lo beneficia esos días de recogimiento y espiritualidad .
En otras medidas, se prohibió a los vendedores ambulantes y callejeros salir a afear la ciudad con su comparsa multicolor y sus gritos conminatorios, no sea que impidan el espejismo de paraíso espiritual con sus ventas y alaridos y demás. Y, para cerrar con broche de oro, en un acto profundamente organizativo y caritativo, los perros callejeros desaparecerán para su pronta recuperación en centros veterinarios especializados, según suponen los amigos de los Corrillos del Parque Caldas.
Yo no sé si a los perros los atendieron como dijeron o si optaron por medidas más económicas y certeras, si los vendedores se quedaron en casa o si los indigentes se sintieron a gusto en sus mazmorras.
Lo único que puedo notar de todo esto, es que el culo de esta Popayán fervorosa y temerosa de Dios está cagado hasta el hartazgo, así pretendamos limpiarnos la carita y aparecer lo más limpios y asépticos posible.
Que sí, muy bonito darle la cara buena al mundo, pero eso carece de importancia si a los habitantes se les muestra un culo descolorido y manchado, si no se limpia la suciedad de una vez por todas. Porque si es cierto que hay que aparentar, más que mostrar, al mundo que Popayán es la capital caucana , pujante, turístico y atractivo, también es cierto que de tanta pujadera la mierda está colmando a nuestras instituciones y el panorama no es nada atractivo, mucho menos para los que nos encontramos calzones adentro, sacándonos la mierda de encima como podemos y limpiándonos la cara para que no se culpe a nadie, porque “mientras se viva, lo demás se va dando”.
Por favor porque no pensamos mas bien de apoyarlos , buscarles un sitio apropiado , esto de convertir nuestra Popayán en una belleza en una semana para que vuelva el lunes de semana santa a la realidad que es difícil ocultar , realmente la Cara Bonita y el Culo Cagado
