En el Congreso, instancia a cargo de la elección la situación sigue en vilo y ahora se enreda con renuncias y peticiones para modificar la lista de elegibles.
La elección del siguiente jefe del ente de control fiscal ha estado lleno de polémicas desde el principio, tomando en cuenta que este procedimiento lo cumplen el Legislativo saliente y el entrante.
Algunos sectores políticos, como la representante a la Cámara, Jennifer Pedraza, han hablado del supuesto favorecimiento del nuevo gobierno hacia Julio César Cárdenas, uno de los aspirantes al cargo. Otros, entre tanto, han criticado la inclinación de varios partidos políticos hacia María Fernanda Rangel.
Al margen de estas especulaciones políticas, el tema jurídico fue el que se tomó la atención este martes. La última de las controversias se dio alrededor de la nueva comisión accidental que nombraron los presidentes del Senado, Roy Barreras, y de la Cámara, David Racero, la cual debe realizar entrevistas a 17 elegibles para el cargo y determinar una lista de 10, de la cual saldría el nuevo alto servidor público.
Pese a que Barreras y Racero han insistido en que el proceso está blindado jurídicamente, este martes se produjo la renuncia de tres de los integrantes de esta instancia y se escucharon varias críticas a la conformación de esta comisión.
«Vamos a subsanar los errores que se han cometido en el proceso de selección del Contralor, tal como han exhortado los jueces privilegiando el mérito El jueves haremos audiencia de entrevistas a aspirantes de manera pública con presencia de veedores nacionales e internacionales», dijo Racero.
Barreras por su parte expresó que, «el proceder del nuevo Congreso frente a la elección de Contralor no sólo es el correcto sino que resulta obligatorio para atender órdenes judiciales. Todas las especulaciones de las redes desaparecerán ante un resultado transparente. Paciencia. Esta mesa corrige fallas anteriores».
Los primeros en presentar sus renuncias fueron los senadores Lidio García, del Partido Liberal, y Juan Felipe Lemus, de ‘la U’. En el caso del congresista liberal, al parecer, habría razones de agenda.
Lemus, por su parte, envió una carta a la mesa directiva del Senado en la que, además de dimitir a la comisión, solicitó “la corrección formal del procedimiento” con el cual se está desarrollando el proceso de elección del siguiente contralor general.
El tercer senador en renunciar a esa comisión accidental fue Humberto de la Calle, quien oficia en el Congreso como independiente.
Según el congresista, si bien era “molesto y hasta sospechoso que el Congreso anterior haya comenzado tan temprano la selección de los candidatos a la Contraloría General”, el nuevo procedimiento tampoco parece ser del todo claro.
“Los tribunales corrigieron la lista (de elegibles a la Contraloría) con criterios de género y hoy, honestamente, me parece más peligroso cambiar esa lista, que ya es un hecho consumado y que tiene una presunción de legitimidad”, afirmó De la Calle.
Desde la Cámara, el representante liberal, Carlos Ardila Espinosa también le pidió a David Racero, presidente de esa corporación, atender el “debido proceso” en la selección del siguiente contralor general de la República.
Según Ardila, los ajustes que debían hacerse en la lista de elegibles para ser jefe del ente de control fiscal ya fueron hechos, con lo que las órdenes judiciales relacionadas con este proceso ya fueron cumplidas.
“Es claro que el proceso de selección del nuevo contralor de la República debe continuar con la lista ya seleccionada”, afirmó el congresista del Putumayo.
Pero el debate más candente se vivía en la noche de este martes en la plenaria del Senado, donde varios congresistas criticaron la decisión de designar una nueva comisión accidental.
El senador por Cambio Radical, Carlos Abraham Jiménez apeló la resolución mediante la cual el Senado nombró a los miembros de esta instancia, pero el presidente del Congreso, Roy Barreras, la rechazó de plano –en principio– por considerar que era un documento conjunto con la Cámara de Representantes y que no podía apelarse en esta corporación.
Barreras, quien tuvo que dejar su silla de presidente del Senado para atender el debate que le hicieron varios congresistas en el pleno de esta corporación, respondió a estas críticas, explicó los pasos del procedimiento y dijo que “nadie violará la ley”.