El 10 de agosto de 1984, siendo las diez de la mañana, asesinaron en el Barrio Provenza de Bucaramanga al médico y exparlamentario santandereano Carlos Toledo Plata, cofundador del Movimiento 19 de abril (M-19), que había permanecido en la clandestinidad durante varios años y que había aceptado el llamado del expresidente conservador Belisario Betancur Cuartas para vincularse al proceso de paz, que marcaba el comienzo de una nueva era en la política colombiana.
Carlos Francisco Toledo Plata, había nacido en Zapatoca (Santander) el 13 de diciembre de 1932, en el hogar formado por el profesor Ángel Miguel Toledo, inspector de educación pública del departamento y señora, Virginia Plata Prada, también educadora, en el seno de una familia católica y había estudiado medicina en la República de Argentina. Era médico traumatólogo cuando se vinculó a la Alianza Nacional Popular (ANAPO), movimiento político creado por el ex presidente y General ® Gustavo Rojas Pinilla.
Con una beca para estudios en el exterior, otorgada por la Organización SENDAS’, que dirigía María Eugenia Rojas de Moreno Díaz, hija del expresidente Rojas Pinilla, realizó sus estudios de medicina en la Universidad de Buenos Aires. En 1952 llegó a especializarse en traumatología en Buenos Aires, Argentina, donde se familiarizó con el peronismo y se unió al grupo peronista de Los Montoneros. Fue director del Hospital San Juan de Dios de Bucaramanga, profesor en el Departamento de Ciencias Clínicas de la Facultad de Salud de la Universidad Industrial de Santander, concejal y presidente del cabildo de Bucaramanga.
Diputado de la Asamblea de Santander y representante a la cámara por el movimiento Alianza Nacional Popular (Anapo), que era dirigida por el general Gustavo Rojas Pinilla, a quien Toledo Plata veía como un líder popular similar a Juan Domingo Perón, a quien admiraba. Toledo fue fundador de la Anapo Socialista luego de que Rojas perdiese fraudulentamente las elecciones presidenciales del 19 de abril de 1970.
Militancia en el M-19
Toledo Plata fue cofundador del M-19 tras el fraude de las elecciones del 19 de abril de 1970, en las que ganó la presidencia de la república el doctor Misael Pastrana Borrero. Su destape como dirigente del M-19 se produjo en 1979 a raíz del robo de las armas del Cantón Norte en Bogotá y de la Espada del Libertador en la Quinta de Bolívar. Usando un pasaporte falso, que lo identificaba como «Carlos Zamora», supuesto ciudadano español, salió del país hacia Ecuador y luego a México y Nicaragua. Durante la Toma de la embajada de la República Dominicana, Toledo se encontraba en Cuba y se trasladó a Panamá.
En febrero de 1981, el M-19 intentó una invasión a territorio nacional por el departamento del Chocó, dirigida por Toledo y Helmer Marín dirigiéndose hacia Tumaco y la columna de Toledo, al enfrentarse con el Ejército Nacional, debió replegarse hacia Ecuador con la ayuda de la reportera española María Martín, usando un pasaporte español falso. En Ecuador trató de conseguir asilo político, pero fue detenido y entregado al Ejército Nacional de Colombia en compañía de Rosemberg Pabón.
Después de un polémico consejo y juicio verbal de guerra, Toledo y un centenar de sus compañeros fueron condenados y encarcelados en cárcel La Picota hasta finales de 1982 cuando salió libre en virtud de la Ley de Amnistía del gobierno de Belisario Betancur, y se reintegró a la vida civil.
Un hombre que creyó en la paz
Carlos Francisco Toledo Plata fue asesinado en la mañana del 10 de agosto de 1984 en Bucaramanga por dos desconocidos que lo esperaban en una moto fuera de su casa, después de haber recibido la amnistía del presidente Betancur. Cuando salía de su casa para trabajar como jefe de traumatología en el hospital San Juan de Dios en Bucaramanga, fue acribillado.
El gobierno culpó a otros grupos guerrilleros y militares aduciendo que estaban en contra del proceso de paz. Como retaliación, un comando del M-19, lanzó un ataque a Yumbo (Valle del Cauca), donde quemaron la Alcaldía y trataron de tomarse el cuartel de la policía mientras arengaban a la población. Aunque su muerte fue un grave golpe para el acuerdo de paz, que lideraba el presidente conservador Belisario Betancur, el gobierno y el M-19 acordaron seguir adelante con el proceso de paz y firmaron los acuerdos de Corinto, Hobo y Medellín, el 24 de agosto de 1984. Su hijo Carlos Francisco Toledo Flórez fue candidato a la Alcaldía de Bucaramanga en 2019 y actualmente es directivo del Partido Verde.
