La papa, más que un tubérculo, es el motor económico y sustento diario de miles de familias en el Cauca. Es un pilar de nuestra identidad rural. Por eso, la reciente iniciativa de la Gobernación del Cauca y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural para enfrentar la amenaza de la Punta Morada de la Papa (PMP) no es solo una buena noticia, sino una acción urgente y necesaria que merece nuestro aplauso y total apoyo.
La Amenaza Invisible y su Impacto Real
La Punta Morada no es una enfermedad menor. Causada por un fitoplasma, una bacteria sin pared celular, y transmitida principalmente por el insecto chicharrita (Paratrioza cockerelli), puede diezmar cosechas enteras. Sus síntomas —el engrosamiento de los tallos, la coloración púrpura de las hojas superiores y la producción de tubérculos pequeños y brotes filiformes— son una sentencia de muerte para el rendimiento y la calidad del cultivo.
Frente a un riesgo de tal magnitud, la reacción articulada de instituciones clave como el ICA, AGROSAVIA, Fedepapa y la academia (Fundación Universitaria), evidenciada en el reciente Seminario de Actualización, demuestra una comprensión clara de la gravedad del problema.
De la Investigación al Campo: La Clave está en la Articulación
El valor de esta jornada radica en su enfoque práctico: llevar la información técnica urgente, los avances científicos y los protocolos de manejo directamente a manos de los más de 70 productores que participaron. La prevención, en casos como la PMP, es la única defensa efectiva, y esta se basa en el conocimiento oportuno.
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Detección Temprana: Aprender a identificar los primeros signos de la enfermedad y la presencia del insecto vector.
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Manejo Integrado: Implementar estrategias que combinan control químico, prácticas culturales y el uso de semilla certificada.
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Colaboración: Entender que la prevención es un esfuerzo colectivo, donde la alerta temprana de un vecino protege la siembra de toda la vereda.
La Gobernación acierta al fomentar estos espacios informativos. No se trata solo de entregar un protocolo, sino de empoderar al productor con las herramientas para tomar decisiones oportunas que protejan su inversión y, por ende, la economía rural de todo el departamento.
Un Llamado a la Continuidad
Este esfuerzo no puede ser flor de un día. La amenaza de la Punta Morada es constante, y la resiliencia del sector papero caucano dependerá de la continuidad y profundidad de estas acciones.
Es fundamental que la articulación entre el sector público, la investigación y los gremios se mantenga activa, asegurando:
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Monitoreo Constante: Establecer una red de vigilancia epidemiológica en las zonas paperas.
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Acceso a Insumos: Facilitar a los pequeños productores el acceso a semillas de calidad y productos de control biológico o químico recomendados.
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Extensión Rural Sostenida: Continuar con las capacitaciones y el acompañamiento técnico directamente en las fincas.
El Cauca está defendiendo una tradición agrícola vital. La prevención de la Punta Morada es, en esencia, la protección de nuestro patrimonio agrario y la seguridad alimentaria de miles de familias. ¡A seguir fortaleciendo este frente de batalla!


































































