A través de un comunicado difundido en redes sociales, las disidencias de las Farc-EP, bajo el mando de alias ‘Iván Mordisco’, negaron cualquier responsabilidad en el atentado contra el senador Miguel Uribe Turbay, ocurrido recientemente en Bogotá. En el mensaje, el grupo armado ilegal se deslindó de los hechos, pero manifestó que no lamenta lo sucedido.
“El Estado Mayor Central de las Farc-EP no planificó, ordenó ni ejecutó ninguna acción contra el político en cuestión”, señalaron en el documento, que fue firmado por unidades del bloque que responde a alias ‘Calarcá’. Además, rechazaron las versiones que los vinculan con supuestos planes de agresión a candidatos presidenciales en el marco de la próxima contienda electoral.
Frente a las acusaciones difundidas por medios y periodistas, los voceros de la estructura armada afirmaron: “Frente a la información tendenciosa que personajes nefastos como Vicky Dávila y otros han difundido sobre un supuesto plan para agredir o asesinar candidatos, esto responde a un interés por ganar votos en la farsa electoral que se avecina”.
El grupo armado también cuestionó duramente al Gobierno Nacional, negando afinidades políticas con el presidente Gustavo Petro y recordando antiguos señalamientos realizados por el propio mandatario. “A los uribistas que dicen que somos amigos de Petro, les aclaramos que somos críticos de este gobierno. Petro es un ilusionista que también aprovecha coyunturas como estas para hacer campaña”, expresaron.
Incluso, reclamaron al presidente por no haber entregado pruebas que, en su momento, dijo tener sobre un supuesto plan para asesinarlo. También acusaron a las Fuerzas Militares de actuar en coordinación con paramilitares en operaciones conjuntas contra las disidencias.
En el mismo comunicado, el grupo guerrillero reiteró su falta de empatía frente al atentado contra Miguel Uribe, a quien señalaron con duras palabras y acusaciones ideológicas: “No lamentamos la vida del fascista Miguel Uribe, que merece el repudio por burlarse de los pobres y justificar la violencia institucional”.
Finalmente, las disidencias expresaron solidaridad con el joven de 14 años que habría participado en el ataque, describiéndolo como una víctima del abandono estatal. “Nos conmueve el niño herido y pateado en el suelo, reflejo de un futuro incierto”, concluye el comunicado.