Viviendas a domicilio. Puede resultar chocante pero es la idea con la que pretende revolucionar el mercado inmobiliario Aaron Holm, el que fuera uno de los impulsores de Amazon Go, y su equipo, equiparando la entrega de llaves de una vivienda a la compra de cualquier objeto a través de internet.
El sistema Blokable, como se denomina la plataforma, reduce los plazos de construcción de casas de años a semanas, empleando la tecnología de producción modular y dando lugar a viviendas en bloque, adaptables e independientes, a un precio de entre 25.000 y 100.000 dólares (entre 23.000 y 94.000 euros al cambio, según el tamaño final de las viviendas).
«No es construcción, es Blokable». Es el lema de esta startup con sede en la ciudad estadounidense de Seattle, que proporciona libertad y flexibilidad a los arquitectos para que desarrollen este tipo de proyectos modulares. Según sus impulsores, construir con el sistema Blokable tiene numerosas ventajas frente a la construcción tradicional, «demasiado lenta para hacer frente a la demanda actual», aseguran.
«En Blokable producimos casas eficientes, modernas, de diseño y en un tiempo muy inferior al que requiere la construcción tradicional de una vivienda», explican desde la compañía. Fundada en 2016, esta startup arrancó su idea con un componente social: ofrecer viviendas asequibles a familias en riesgo de exclusión.
Pero lo cierto es que cualquier cliente en acceder a una de estas viviendas puede cumplimentar el formulario que se encuentra en la web de Blokable y explicar los detalles de su proyecto de hogar. Después, los técnicos de la plataforma se pondrán en contacto con el usuario y evaluarán la trazabilidad del boceto.
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Para adaptarse a las nuevas necesidades de los propietarios, cada bloque de viviendas dispondrá de los últimos avances en tecnología domótica y en términos de eficiencia energética. Los residentes podrán controlar de manera remota el termostato, la iluminación de la vivienda y los aspectos relacionados con su seguridad. Además, esta tecnología permite seleccionar diferentes modos según la situación en la que se encuentre el propietario: en casa, fuera de casa, durmiendo o de vacaciones.
Por otra parte, existe la posibilidad de que los usuarios personalicen sus casas y añadan cocinas y baños modulares -básicos o de lujo-, escaleras y ventanas.
Por ahora, el prototipo contempla módulos de entre seis y 12 metros de longitud y sólo está disponible en Vancouver, Washington, donde se ubica la fábrica de la empresa, pero la idea es aterrizar en múltiples países. Tras su construcción, los módulos se transportan en camiones desde la fábrica hasta el lugar de destino.
«La instalación de los bloques se realiza de manera que cumpla los estándares de eficiencia energética y nos encontramos en una búsqueda continua de métodos que mejoren la sostenibilidad», aseguran desde Blokable.
Se trata, en definitiva, de un concepto innovador, que supera la construcción de viviendas modulares y que da fe de la transformación que experimenta el sector inmobiliario en todas sus facetas: desde el boceto del proyecto hasta la entrega final del producto.
