Están desmoralizados por el desarme de la fuerza pública. Desilusionados por la orden de desarme de la fuerza pública, que dispuso el gobierno de Gustavo Petro y que puede convertirlos en ‘carne de cañón’ de los grupos terroristas, veintitrés (23) coroneles y tenientes coroneles de la policía nacional presentaron la solicitud de ‘Retiro Voluntario’, dejando desmantelados algunos comandos de distrito de los departamentos de Antioquia, Valle del Cauca, Santander, Norte de Santander y Cundinamarca.
Desde los cuarteles de la Policía se dice que varios oficiales se van porque no encuentran motivación para estar en la institución, a raíz de las decisiones del gobierno que los ha tratado con total desprecio de la vida humana.
Problemas de perturbación del orden público que se presentaron la semana pasada en el departamento de Antioquia, donde la Policía no pudo actuar para desbloquear las vías que se tomaron mineros ilegales y artesanales, que destruyeron vehículos y saquearon cargamentos de productos agrícolas y mercancías, son algunos de los motivos para solicitar el retiro voluntario, han expresado los comandantes de la fuerza disponible que figuran en la lista que conoce nuestro Medios de Comunicaciónes CaucaExtremo.com y Colombia Extremo Televisión ( canal de la parrila de EMTEL .S.A.E.S.P)
Un alto oficial de la Policía Nacional, que oculta su nombre por razones obvias, indicó que ellos habían preferido quedarse quietos frente a los saqueos de vehículos por temor a represalias y retaliaciones que el gobierno del presidente Gustavo Petro y de su ministro de defensa, Iván Vásquez, han venido adoptando, con llamados de atención y anotaciones de mala conducta en las respectivas hojas de vida.
Otro ejemplo que han puesto los uniformados que están activos, pero que prefieren hablar desde el anonimato, es el de las invasiones ilegales de predios urbanos y rurales, privados y públicos, donde la Policía no puede intervenir para evitar choques con la comunidad.
Para quienes formaron parte de la institución, como el general Juan Carlos Buitrago, con dicha decisión se desarticuló la inteligencia de la Policía. Pues aseguró que con la salida de los más de 20 generales se acaba con toda una generación de uniformados que se habían formado en labores de inteligencia, que eran expertos en combatir al crimen organizado, como lo han sido las FARC, los carteles de Medellín y de Cali, las disidencias de las FARC, la Nueva Marquetalia y otros grupos criminales.