Los representantes a la Cámara, Catherine Juvinao, David Racero, Julio César Triana y el senador del partido conservador, Germán Blanco, presentaron un proyecto de ley estatutaria con el que buscan establecer la rendición de cuentas obligatoria para los congresistas. De acuerdo con lo propuesto, dentro de los 10 días hábiles siguientes a la finalización de cada legislatura, los congresistas deberán presentar ante la Secretaría General respectiva, bien sea de Senado o de Cámara, un informe de gestión de forma general y en formato de datos abiertos.
“Además de realizar el control político, estarán obligados a informar con quién se están reuniendo, con quiénes están haciendo el lobby, si están recibiendo regalos, si los recibieron y si han realizado lobby para la contratación oficial, que les está igualmente prohibida’. El senador del partido Conservador Germán Blanco, coautor de la iniciativa, aseguró que este mecanismo es una forma de autorregulación al Congreso de la República en su institucionalidad.
Sumado a esta iniciativa se creó e instaló en el Capitolio Nacional la Secretaria Técnica Anticorrupción y de integridad pública, en conjunto con la Misión de Observación Electoral, Transparencia por Colombia y el Instituto Anticorrupción, con el fin de identificar los riesgos de corrupción en los proyectos de ley que se presentan en el Congreso de Colombia, muchos de las cuales representan intereses privados de los parlamentarios, acusados de realizar tráfico de influencias desde sus curules..