A solo dos meses de que inicie la Eliminatoria al Mundial 2026 hay optimismo entre los colombianos de que la Tricolor haga una excelente presentación y, aunque es cierto que las nuevas reglas de juego dictan que por la Conmebol clasificarán 6 equipos de forma directa y el séptimo de la tabla irá al repechaje, lo que invita al positivismo ha sido la buena respuesta que ha dado la Selección desde que es dirigida por el técnico argentino Néstor Lorenzo.
Además de la buena imagen en estos compromisos, lo que refuerza la fe cafetera son los resultados: 6 victorias y 2 empates.
Sin embargo, hoy que entramos a esa recta final de cara al inicio de la Eliminatoria en septiembre, hay que dejar atrás los triunfalismos y llegar al primer duelo, ante Venezuela, convencidos de que el camino será duro, porque en otros procesos la confianza excesiva terminó acabando con la ilusión.
Sin duda, Lorenzo ha tenido un gran arranque en este nuevo ciclo de la Tricolor y el primer objetivo será el título de la Copa América de 2024, antes de asegurar la clasificación al Mundial de 2026.
“Vamos a ganarla. El objetivo es ganar cada partido que jugamos, vamos a encontrarnos con el límite lógico que da el fútbol pero siempre jugamos para triunfar. Hay un rival, cada partido es una historia, uno no puede prometer nada pero sí la entrega máxima para lograr el resultado. No vamos a jugar para ver qué pasa, vamos a jugar para ganar”, fueron algunas de las declaraciones del seleccionador en la última gira, en la que superó a Irak y Alemania.
Desempeño que invita a soñar
El rendimiento del técnico argentino es del 83% en los compromisos disputados hasta hoy, en los que ha tenido la oportunidad de probar nuevos nombres, tanto del fútbol local como internacional.
Además, se le ha visto muy activo observando los partidos de la Liga local, pero sabe que su termómetro real son las Eliminatorias, donde hará su debut en partidos oficiales con la Tricolor.
Varios exfutbolistas invitan a la cautela y a que no vuelva a haber triunfalismos, sobre todo desde los medios de comunicación para que el proceso llegue a feliz término.
Hárold Lozano, quien integró la Selección que clasificó a los mundiales de 1994 y 1998, recordó que antes del Mundial del 94 ellos eran catalogados como campeones del mundo por el 5-0 que lograron sobre Argentina y por la cantidad de partidos amistosos que jugaron y en los que parecían invencibles.
“Colombia viene de ganarle a Alemania 2-0 y eso puede ser un riesgo, porque estamos en un país que no conoce puntos medios, sino que es de extremos. O somos los más malos o los mejores y eso nos ha hecho mucho daño a través de la historia”.
Cuidado con los demás
Con él coincide el exseleccionador nacional, Luis Augusto Chiqui García, quien recuerda que el proceso con el portugués Carlos Queiroz empezó con bombos y platillos cuando le ganó a Argentina en la Copa América de 2019 y después se desinfló con todo lo que pasó alrededor, y terminó siendo un fracaso.
“Yo ya veo a mucha gente diciendo que es fácil clasificar al Mundial con los nuevos cupos, pero no han hecho un análisis del crecimiento de otros países. En este momento, Colombia puede ser superior a Venezuela y Bolivia, pero con Uruguay, Chile, Ecuador y Paraguay las cosas son parejas”.
García cree que, además de Brasil y Argentina, que lideran el fútbol del continente, habrá que tener cuidado con el nuevo proceso de Marcelo Bielsa en Uruguay; con el conocimiento que ya tiene el técnico Guillermo Barros Schelotto de Paraguay; el de Eduardo Berizzo de Chile. Además, Ecuador tiene una memoria colectiva del trabajo de Gustavo Alfaro, que ahora tomó el entrenador español Félix Sánchez.