Aunque algunas fuentes sostienen que Bucaramanga nunca tuvo una fundación oficial, otras fuentes coinciden en que Andrés Páez de Sotomayor y Miguel de Trujillo fueron quienes fundaron el caserío de Bucaramanga como un resguardo indígena adscrito a Pamplona.
Las historias sobre las fundaciones de las principales ciudades del territorio colombiano están rodeadas de muchos datos reales y otros aproximados, porque en algunas de estas historias no se hizo un detallado recuento de los hechos, o no se le dio importancia a la fecha y se empezaron a erigir las que hoy en día son las principales ciudades colombianas.
La historia reza que el fundador de Bucaramanga fue el Capitán Andrés Páez de Sotomayor a quien acompañó el presbítero Miguel de Trujillo el 22 de diciembre de 1622 y que la fundación tuvo lugar durante una eucaristía celebrada en el lugar que posteriormente ocuparía la capilla de los Dolores, hoy carrera 10 con calle 34, quienes siguieron las indicaciones del oidor español Juan de Villabona Zubiaurre.
Lo que se conoce como su fundación fue el traslado de varios asentamientos indígenas al lugar que hoy en día ocupa el parque Custodio García Rovira y sus alrededores. Este traslado se realizó con el fin de facilitar el adoctrinamiento y catequización de los indígenas.
Parroquia transformada en villa
En aquella época, Juan de Villabona y Zubiaurre hacía las veces de juez en las audiencias del reino y tenía la obligación de oír y dar sentencia a las causas y pleitos. Por este motivo se le denominaba oidor y llegó a la comarca que posteriormente sería Bucaramanga, asignado por la Real Audiencia.
A este caserío se le asigna un cura doctrinero llamado Miguel de Trujillo, a quien también se le construye una casa dentro del caserío. Este cura tiene la obligación de determinar diversos aspectos de la organización del pueblo. De igual manera, el oidor Villabona dispone que Antonio Guzmán (alcalde mayor de Minas de Las Vetas, Montuosa y Río de Oro) sea quien se encargue de apoyar a Miguel de Trujillo en la labor de construir el caserío.
En 1824, con la llegada de la independencia, la parroquia se transforma en la villa de Bucaramanga y, con la constitución de 1886, se declara finalmente a Bucaramanga como un municipio y la capital del departamento de Santander.
Una ciudad para recorrer y disfrutar que gusta y encanta
A Bucaramanga, la capital de Santander se la ha denominado como la “Ciudad Bonita de Colombia o “Ciudad de los Parques”, pero más allá de estos remoquetes, tiene una estructura urbana y una arquitectura que al recorrerla gusta y encanta a quienes tienen el placer de visitarla, porque fuera de estos atractivos, se encuentra rodeada de una impresionante reserva de bosques, ríos y espectaculares montañas.
En ese cúmulo de sitios para visitar están obras urbanas e iglesias que conservan la identidad de su construcción y sus toques coloniales que son los que se encargan de deleitar a los visitantes. Algunos de esos parques destacados son:
Parque del agua: Este sitio se conocía como “Los Tanques” y la compañía del Acueducto de la ciudad transformó este espacio en un parque público de una belleza inigualable. Una obra que devuelve a los habitantes del área Metropolitana de Bucaramanga un área de recreación de 3.6 hectáreas.
Parque de las Palmas: Es uno de los sitios tradicionales de la ciudad de Bucaramanga, alrededor de él se congregan algunos de los mejores cafés y restaurantes de la ciudad, es un punto de encuentro de la comunidad bumanguesa.
Parque García Rovira: Ubicado en pleno centro de la ciudad. Debe su nombre a uno de los héroes de la independencia, y ubicados en cada uno de sus costados se encuentran la Gobernación de Santander, la Alcaldía de Bucaramanga, la Parroquia de San Laureano, la Capilla de Los Dolores y la Plaza Cívica Luis Carlos Galán Sarmiento.
Parque Antonia Santos: Este parque es importante para la ciudad por la belleza de su vegetación y porque a uno de sus costados se encuentra la sede del Arzobispado Municipal. La mujer con cuyo nombre fue bautizado este hermoso sitio es una de las principales heroínas de la lucha por la independencia de Colombia.
Parque Santander: Considerado por muchos como el parque más importante de la ciudad, por el significado histórico y comercial de las edificaciones que lo rodean, en especial el Club del Comercio; importante pieza arquitectónica de estilo neoclásico y centro de reunión de la élite tradicional bumanguesa.
Parque Cultural del Oriente: Está catalogado como uno de los pulmones de la ciudad, debido a la gran cantidad y variedad de árboles y plantas que se encuentran dentro de él. Es el parque más nuevo que existe en Bucaramanga y su construcción y administración está a cargo de la Sociedad de Mejoras Públicas. Está abierto al público todos los días y semanalmente se realizan diversas actividades culturales para toda la comunidad.
Parque de los Niños: Es uno de los centros de recreación más tradicionales de la ciudad. Está situado sobre la carrera 27, una de las principales arterias viales, y cuenta con varias canchas de baloncesto y tenis de campo. Cerca de él, se encuentran la sede del Instituto Municipal de Cultura y La Clínica Los Comuneros, que pertenece al Instituto de Seguros Sociales.
Parque Centenario: Fue construido para exaltar la memoria de Aquileo Parra, el único presidente santandereano que ha tenido nuestro país. Está rodeado por dos monumentos históricos de la ciudad: el Antiguo Colegio de Nuestra Señora del Pilar y el Teatro Santander; importante centro cultural de la ciudad.
Parque Bolívar: El escultor local Carlos Gómez fue el encargado de elaborar la imponente estatua de El Libertador, que se encuentra en el centro de este parque, situado en la calle 37 entre carreras 22 y 23. Fue construido siguiendo la costumbre que existe en la mayoría de los municipios colombianos: rendir un homenaje al General Simón Bolívar.
Iglesias con historia
Iglesia de la Sagrada Familia: Es la Catedral de la ciudad de Bucaramanga. Se terminó de construir en el año de 1.887. Ubicada frente al Parque Santander, es una obra majestuosa y una de las principales construcciones del siglo XIX.
Capilla de los Dolores: Es el templo más antiguo de la ciudad. Su construcción es extremadamente sencilla y su tamaño es bastante reducido. Está ubicada en un costado del Parque García Rovira, frente a la Iglesia de San Laureano. La riqueza histórica de la Capilla de Los Dolores consiste en que ésta fue la sede de la Parroquia de Nuestra Señora de Chiquinquirá y San Laureano del Real de Minas de Bucaramanga, nombre que recibió la ciudad desde 1.778 hasta la independencia de España. La Capilla de Los Dolores fue declarada recientemente como patrimonio histórico de la República de Colombia.
Iglesia de San Laureano: Es una de las más antiguas de la ciudad; sus libros de bautizo datan de 1.774, es decir, 4 años antes de la erección de la Parroquia de Bucaramanga. Está ubicada en la carrera 12 con calle 37, a un costado del Parque García Rovira. Su construcción presenta características típicas del siglo XIX. La iglesia de San Laureano es, sin duda, una de las principales piezas arquitectónicas y centro de congregación religiosa de Bucaramanga.
Foto: Liliana Rincón Barajas / tomado : EL FRENTE