Short Message Service eso es el SMS. Si bien logró masificación hace pocos años, de la mano de los teléfonos celulares, el SMS tiene una historia que se remonta a 1985 cuando técnicos de origen francés y alemán establecieron el estándar de telecomunicaciones que se utiliza hoy para enviar mensajes de texto.
Los SMS nacieron como una forma de comunicación entre las telefónicas y sus clientes.Con el correr del tiempo y dada la popularidad del sistema, que en principio fue gratuito, el servicio comenzó a ser pago.
El despegue de los SMS se empieza a dar a partir del año 2000 cuando las telefónicas empiezan a mejorar el servicio y lo ven como un negocio a explotar. Así es como en 2003 surgieron los sistemas de números cortos (como el: “mandá risa al 2020” ), también se agregaron servicios premium como los que permiten descargar ringtones y demás contenido multimedia. Al listado podemos agregar el hermano mayor (que en esta época de internet móvil ya quedó un poco relegado), el MMS (Multimedia Message Service) que permite compartir entre usuarios contenidos multimedia.
La importancia del mensaje de texto en la telefonía móvil llegó al punto de superar incluso al uso del sistema de voz, que es casi un estorbo. En 2009 los SMS generaron una ganancia que ronda los u$s150 mil millones y promete seguir creciendo a fuerza de nuevas utilidades.
Ahora bien, el SMS es algo más que simplemente un sistema de comunicación, también trae aparejado prácticas que claramente afectaron nuestra vida en estos 25 años. Acá compilamos algunas de las cosas que cambiaron ¿Vos cuál agregarías? Contanos
Cambió las relaciones de pareja
Cuantos más medios tenemos a nuestra disposición menor, y más complicada, es la comunicación. ¿En qué cambió la vida de pareja el SMS? Nunca son suficientes 160 caracteres para responder lo que nuestra pareja nos pide, ergo: siempre quedamos en off side. Ni que hablar si alguien piratea y en vez de mandarle el “comprá preservativos, nos vemos en el bar de siempre” a tu amante, se lo mandás a tu pareja por equivocación.
Por otro lado, el mensaje de texto nos deja al abismo de usarlo para todo; desde un: “querés salir conmigo” hasta un “me parece que es hora de ver otras personas “. Es sanguinario para algunos y una solución simple para otros.

Los famosos manda risa al 2020 (que ya nombramos más arriba) son una emergente que sólo se puede leer a través de la masificación de los mensajes de texto. Desde chistes de salón hasta wallpapers subido de tonos o consejos para encarar chicas en la calle, todo se puede conseguir con el mágico número y un celular.
Por otro lado, están los programas de TV (desde Intrusos hasta Call TV) y los concursos creados alrededor de este tipo de sistemas son casi “vampiros de los SMS”. Una vez que probaron tu mensaje, no paran de bombardearte para que sigas participando y, obviamente, llenando sus arcas por míseros 100 pesos o algo similar.
Pero no todo son servicios “de baja monta”, hay algunos que tienen una utilidad mayor, como pedidos de información, consultas o recibir noticias personalizadas.

Siguiendo un poco con el primer ítem, los sms y los celulares arruinaron algunas de los acuerdos sociales más básicos: la puntualidad y la conversación. La primera es fácil de descubrir. Ya NADIE arreglar ni hora ni lugar para encontrarse: – Nos vemos mañana -¿Hora? – No se, nosmensajeamos. Pero no sólo eso, los que suelen ser puntuales caen bajo el yugo de pensar que si no se puede arribar en horario, un “estoy llegando” puede resolver cualquier cosa.
Por otro lado está la conversación. El teléfono nos prometió mejorar y ampliar la conversación con otras personas; el celular redobló esa promesa. Hoy el SMS la mata. El uso y abuso de “ok”“quedamos asi” y demás latiguillos de breves 160 caracteres, lo único que hacen es degradar el viejo y tan querido hábito de llamar a alguien para saber cómo está.
tomado // conexionbrando