Ya es muy numeroso el listado de quienes, así sea tímidamente, han empezado con la tarea de hacer sonar sus nombres como posibles candidatos a la Gobernación del Cauca y las Alcaldías de Popayán , Guapi , Páez y otras , utilizando estratégicamente todo tipo de argucias para maquillar sus salpicadas intensiones.
Al parecer pretenden seguir con el dominio del poder político heredado como era la modalidad y al estilo del “renacuajo paseador”, por ahí chapalean.
Por lo visto están mostrándose como ejemplares modelos del civismo, la decencia, la pulcritud, las iniciativas y los grandes proyectos, para lo cual terminarán recolectando firmas o portando sin vergüenza ni autoridad moral las banderas de la transparencia, confiados en que los votos del desprecio por la política tradicional expresado en las urnas en las elecciones pasadas serán para ellos, pues se sienten con el derecho a reclamar, todos los favores de una sociedad pusilánime que siempre ha estado sometida por su propio silencio.
Hay que observarlos en sus preparativos para treparse a la tarima política, confiados en que el pueblo, por su miopía ancestral, otra vez, termine torpemente entregándoles las riendas de Popayán, Timbiqui, Piedamo, Páez y algunos más que no se pueden mencionar pero conocemos.
Ilusos. Lo que no imaginan es que la taza de la que ellos han abusado sin conmiseración alguna, está a punto de rebozarse.
No saben que ese pueblo supuestamente estúpido, ya se dio cuenta que los últimos años los hemos perdido, esperando buenas acciones de esa clase política contaminada, de la que solo hemos recibido desengaños, maltratos, decepciones y corrupción.
Que interesante será verlos en el ruedo político, donde el mismo pueblo proceda a dejar al descubierto esa cruda realidad caucana, que han logrado camuflar y de la cual todos esos en altísimo grado son responsables de las desgracias, pestes y atrocidades que estamos padeciendo.
Siendo que algunos de estos nefastos protagonistas, aún tienen sus dudas sobre el vuelco y la avalancha del pueblo contra estas prácticas corruptas de los autores del envilecimiento político que desde el siglo pasado nos aqueja, no queda otro recurso tan válido y sencillo como simplemente escuchar y pensar inteligentemente
.
Pongámonos en la tarea de hacer este sano ejercicio democrático y después con poder de raciocinio seamos los socializadores de la gran verdad. Así de fácil.
Dios bendiga a todos y el mejor regalo que le podemos entregar a nuestras regiones una elección en octubre reflexionando que debemos votar por gente que realmente trabaje por nuestros municipios