Gustavo Petro experimenta un futuro político enrarecido y por eso anunció que luchará “pacíficamente” para defenderlo. La Corte Constitucional ratificó la competencia de entes de control para vetar de cargos públicos a quienes no paguen sus sanciones. Petro tiene suspendida una multa por 200.000 millones que podría volver a quedar en firme y así obstaculizar su camino e inhabilitarlo para ocupar cargos públicos.
Petro recurrirá a la Corte Interamericana de Derechos Humanos. “Vamos a enviar oficialmente (a la CIDH) la sentencia completa de la Corte Constitucional y vamos a pedir la expedición de acciones inmediatas cautelares antes de la sentencia final, porque de manera sistemática desde el año 2013 a la fecha vengo recibiendo este tipo de persecución buscando que no pueda hacer política legal”, dijo el senador de la Colombia Humana.
Para Petro esto es un tema político más que jurídico, asegura que detrás de la decisión de la corte lo que quieren sus detractores es impedir que llegue a la Presidencia, o que por lo menos lo pueda intentar de nuevo.
“La corte dirá que en los juicios de responsabilidad fiscal si se paga la multa no hay problema. Pero lo que ha sucedido contra mí desde la Contraloría Distrital -manejada por el entonces candidato Vargas Lleras que tiene también una presencia muy importante en la corte porque ayudó a elegir magistrados- es que se me pusieran multas impagables. La primera de 200.000 millones de pesos, todo el hueco entre las tarifas que pagaba cada pasajero multiplicado por todos los pasajeros durante un año. De acuerdo a esta sentencia yo estaría inhabilitado de por vida”, explicó Petro tras conocer la decisión.
Esa millonaria multa se suspendió por una decisión judicial que es la que le permitió ocupar su curul en el Congreso, a la cual tenía derecho por ocupar el segundo lugar en las elecciones presidenciales. Sin embargo, este proceso le ha dado dolores de cabeza desde 2013.
Petro, además, se resguardará en la Convención Americana sobre Derechos Humanos. “El artículo 23 de la Convención dice que solo se le pueden quitar derechos políticos a cualquier ciudadano -en todo el continente americano- solo si cometió un delito y hay sentencia de un juez penal. Obviamente aquí estamos frente a una ruptura de la convención americana”, añadió el senador.
Los planes de Petro son ejercer la mayor presión posible agotando las instancias nacionales e internacionales y convocando a los colombianos a protestar: “El electorado de la Colombia Humana tiene que salir a la calle, esa es mi solicitud”. El senador plantea que esta es una batalla que también deben luchar los ocho millones de votantes que lo apoyaron en segunda vuelta, porque considera que también los están excluyendo usando todo tipo de ‘armas’.
